Un aspecto singular de este proyecto, situado en Santa Cruz (Oleiros, A Coruña), es que el promotor destina 19.908 m2 de suelo clasificado como urbano y de titularidad privada, a la construcción de un parque, que será cedido para su uso como espacio verde público.
Se fijaron una serie de premisas de diseño y construcción del espacio verde para garantizar el uso y el buen funcionamiento desde la perspectiva social (espacios flexibles,
integración en el tejido urbano), medioambiental (biodiversidad, conectividad ecológica) y de mantenimiento (bajo mantenimiento, mantenimiento ecológico y
fomento de la biodiversidad).
Se persigue la creación de espacios flexibles, adaptados a distintos tipos de usuarios y capaces de acoger distintos usos gracias a la configuración del propio espacio y a la
selección de mobiliario, con zonas de estar, bancos, mesas, zona cubierta, zonas de juego, deporte...
Se busca la conectividad del parque con el tejido urbano existente. Las circulaciones se organizan teniendo en cuenta los desplazamientos habituales que actualmente se producen por las calles colindantes de la zona de actuación (carentes de aceras), de forma que la circulación peatonal discurra por el parque y sean recorridos más seguros y agradables.
Diseño para la biodiversidad, el espacio verde será de carácter natural: sistema de riego solo en zonas puntuales, espacios vegetados que proporcionen hábitat, alimento y refugio
para la fauna como aves y polinizadores. Distintos espacios de agua (como estanques, lugares de almacenamiento de agua, y zonas de infiltración) que fomenten la biodiversidad. Se busca conseguir
un espacio que además de recreo, ocio y deporte, proporcione también los beneficios del contacto con la naturaleza.
Conectividad ecológica, el diseño de espacios y la selección de plantas y árboles, fomentan la conectividad ecológica con los corredores ecológicos próximos como el Río do Deixo
y los bosques y roquedos costeros.
Se respeta la topografía existente y se evita alterar el suelo más de lo necesario, se conservan así las pendientes naturales que permiten y facilitan la integración del parque con su entorno. Se
conserva el funcionamiento del ciclo del agua, al emplear zonas de infiltración para la escorrentía, y la reducción a mínimos de la impermeabilización del suelo.
Restauración de muros de piedra, que forman parte del patrimonio de la finca, también el reempleo y restauración de elementos construidos existentes, persiguiendo la economía de medios mediante
el consumo mínimo de recursos y reducción de los residuos.